viernes, 31 de julio de 2009

Nero Nero

A dos meses de tu desaparición y sin ninguna noticia.

Querido hijo,
En el altar de mi corazón están: tu sonrisa, tu foto con Ana Carolina, la colita de zorro que te di como amuleto en tercer año, el libro de la tesis de tu doctorado, el osito de la ONU, un dolor que cada día es más profundo y el recuerdo de que para conectarnos usábamos las palabras de Mi marciano favorito:
-"Nero Nero"- Pablo.
Estamos en contacto.